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4 Octubre 2016

El Secretario General de la ONU anuncia la creación de un mandato para combatir las represalias

El 3 de octubre de 2016, el Secretario General de las Naciones Unidas Ban Ki-moon anunció la creación de un mandato especial para combatir las represalias contra los/as defensores/as de derechos humanos que trabajan con las Naciones Unidas para abordar las violaciones de derechos humanos en sus comunidades.

Los/as defensores/as de derechos humanos reportan periódicamente a Front Line Defenders actos de vigilancia, detención arbitraria, amenazas, acoso, ataques físicos y tortura tras de su participación en conferencias sobre derechos humanos o actividades de incidencia internacionales. Algunos Estados están adoptando cada vez más medidas punitivas contra los/as defensores/as de derechos humanos que participan en el trabajo de defensa de derechos humanos a nivel internacional, incluyendo los organizados por las Naciones Unidas.

Para dar respuesta a estas denuncias de represalias contra los/as defensores/as de derechos humanos, el Secretario General ha anunciado que Andrew Gilmour, Secretario General Adjunto, recibirá el mandato especial de abordar las denuncias contra los/as DDH por su colaboración con órganos y mecanismos internacionales de derechos humanos.

Desde el 2011, el Secretario General ha publicado anualmente un informe que documenta las intimidaciones y represalias contra las personas que trabajan con las Naciones Unidas para proteger y promover los derechos humanos a nivel local. Defensores/as que han contribuido o asistido al proceso del EPU, a reuniones con el Consejo de Derechos Humanos de la ONU o a consultas con organismos de las Naciones Unidas han recibido ataques y amenazas de muerte explícitamente vinculadas a su colaboración internacional. El objetivo de este tipo de ataques es intimidar y evitar que los defensores de derechos humanos locales se involucren con mecanismos internacionales que pueden apoyar su lucha por los derechos.

Las Naciones Unidas no podrían hacer su valiosa labor en favor de los derechos humanos sin aquellas personas que cooperan con los/as representantes de las Naciones Unidas, los/as relatores/as y otros mecanismos. Cuando estas personas son objeto de represalias, todos estamos menos seguros. Cuando se reprime su cooperación, nuestro trabajo de defensa de los derechos humanos también se convierte en una víctima. - Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon.

En su informe “Cooperación con las Naciones Unidas, sus representantes y mecanismos en la esfera de los derechos humanos” publicado en agosto, el Secretario General habló de las represalias contra defensores/as de derechos humanos y grupos de la sociedad civil en todo el mundo, citando ejemplos en Vietnam, Los Emiratos Árabes Unidos, Omán, Kuwait, Chipre, Eritrea y China. Destacó que si bien es "la principal obligación del Estado proteger a quienes cooperan con las Naciones Unidas", los casos en su informe confirman que los propios Estados siguen hostigando, atacando y deteniendo a los/as DDH y a otros actores de la sociedad civil que defienden los derechos humanos a nivel internacional.

Los actos de intimidación y represalias son perpetrados a menudo por funcionarios/as del propio Estado. Por tanto, exhorto de nuevo a los Estados a que adopten todas las medidas necesarias para evitar que se produzcan estos actos, por ejemplo mediante la sensibilización. Insto a los gobiernos a que envíen mensajes claros a todos/as los/as funcionarios/as del Estado de que tales actos no serán tolerados, y a que garanticen la rendición de cuentas en caso de que ocurran.

En consecuencia, si bien la iniciativa es un paso positivo y necesario hacia la protección de los/as defensores/as de derechos humanos contra los ataques y la persecución, la eficacia del mandato se comprobará de acuerdo a la rapidez, eficacia y capacidad del titular del mandato para revisar y responder a las denuncias de represalias de los/as defensores de derechos humanos. La participación y el apoyo plenos por parte de los Estados miembros de las Naciones Unidas, que ahora tienen la obligación de facilitar el acceso al Secretario General Adjunto Gilmour y de responder a las denuncias de represalias, son cuciales para este proceso.

En respuesta a esta noticia, la Directora Ejecutiva de Front Line Defenders Mary Lawlor expresó:

La creación de un mandato para recibir las denuncias de represalias contra los/as DDH y darles respuesta es una iniciativa positiva y necesaria, dada la persecución de los/as activistas que trabajan con organismos de la ONU para luchar por los derechos de sus comunidades. El reconocimiento de la protección plena de los/as DDH, exige el compromiso de los Estados miembros de la ONU de cooperar con el Secretario General Adjunto en su nueva misión. - Mary Lawlor, Directora Ejecutiva, Front Line Defenders.

Para más información o para dirigirse a Mary Lawlor contacte con:

Erin Kilbride

erin@frontlinedefenders.org

+353-1-212-3750