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CODECA

CODECA

Comité de Desarrollo Campesino
CODECA Informe
2019

REPRESIÓN CONTRA CODECA:
LA PELIGROSA VOCACION DE EJERCER Y DEFENDER DERECHOS EN GUATEMALA

Declaración de CODECA
2017

Si confiamos en nosotros/as mismos/as y somos conscientes de nuestro papel como defensores/as de derechos humanos, no habrá forma de que nos pongan nuevamente de rodillas.

CODECA (Comité de Desarrollo Campesino) es una organización de derechos humanos con sede en Mazatenango, Suchitepéquez, Guatemala. CODECA trabaja desde 1992 para mejorar la situación de la población rural pobre en Guatemala, centrándose en temas como las condiciones salariales de agricultores, la reforma agraria y la nacionalización de la energía eléctrica en el país.

Debido a su trabajo, los/as integrantes de CODECA han sufrido amenazas, hostigamiento, persecución y secuestros. El 11 de julio de 2012, el defensor de derechos humanos Enrique Linares, miembro de CODECA, fue asesinado a tiros en Zacapa, Guatemala.

El 26 de junio de 2014, cinco agentes de la compañía ENERGUATE capturaron y secuestraron al fundador de CODECA, Mauro Vay, junto con otros/as dos DDH de la organización. Después del secuestro, los/as tres DDH fueron encarcelados/as injustamente durante más de tres meses. El 16 de marzo de 2016, el Juez Único del Tribunal de Sentencia Penal, Narcoactividad y Delitos contra el Ambiente de Huehuetenango los condenó por el delito de "intento de fraude", a pesar de que no había pruebas en su contra.

El 27 de junio de 2016, el Grupo de Trabajo de la ONU sobre Detenciones Arbitrarias instó a las autoridades guatemaltecas a liberar a los/as DDH y, un año después, la Corte de Apelaciones de Huehuetenango los absolvió de todos los cargos.

En una declaración publicada después de su liberación, CODECA escribió: "Aprendimos que si estamos organizados, si nos movilizamos y nos comunicamos de manera efectiva, por más grande que sea el enemigo criminal, siempre será posible ganar. Si confiamos en nosotros/as mismos/as y somos conscientes de nuestro papel como defensores/as de derechos humanos, no habrá forma de que nos pongan nuevamente de rodillas. Aprendimos que si tenemos ideas claras de dónde estamos y hacia dónde queremos ir, y perseveramos, no hay mentiras ni calumnias que puedan distraernos. Aprendimos que compañías como ENERGUATE pueden comprar a un juez o a un fiscal, pero no pueden comprar a todos los jueces del país o del mundo".

 

Desde que Otto Pérez Molina asumió la presidencia en enero de 2012, han aumentado los casos de hostigamiento y amenazas contra DDH. Los defensores y defensoras de derechos humanos (DDH) de Guatemala son objeto de amenazas de muerte, ataques físicos, acoso, vigilancia, estigmatización, hostigamiento judicial, detención arbitraria, desaparición forzada y asesinato. Muchas de las violaciones son perpetradas por estructuras clandestinas de seguridad y grupos ilegales. El alto nivel de impunidad que gozan los perpetradores aumenta exponencialmente el riesgo para los/as DDH.