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Asesinato de la defensora de derechos humanos Ruth Alicia López Guisao

Estatus: 
Asesinada
Sobre la situación

El 2 de marzo de 2017, la defensora de derechos humanos Ruth Alicia López Guisao estaba en Medellín, Colombia, cuando fue asesinada a tiros por dos sicarios no identificados.
 

Sobre Ruth Alicia Lopez Guisao

ruth_alicia.jpgRuth Alicia López Guisao fue miembro de la Asociación Agroecológica Interétnica e Intercultural ASONKINCHAS. La defensora de derechos humanos trabajó con un grupo de doce comunidades indígenas y afrodescendientes de Medio San Juan y Sipí en el departamento de Chocó, en un proyecto de seguridad alimentaria organizado por la Cumbre Agraria. Tanto Ruth Alicia López Guisao como su familia son respetadas líderes comunitarias reconocidas por su sentido de responsabilidad social y su solidaridad con las comunidades en las que han vivido.

7 Marzo 2017
Asesinato de la defensora de derechos humanos Ruth Alicia López Guisao

El 2 de marzo de 2017, la defensora de derechos humanos Ruth Alicia López Guisao estaba en Medellín, Colombia, cuando fue asesinada a tiros por dos sicarios no identificados.

Descarga el llamamiento urgente (PDF)

El 2 de marzo de 2017, Ruth Alicia López Guisao estaba visitando a familiares en el barrio de Olaya Herrara en Medellín, Colombia, cuando fue asesinada por sicarios no identificados. Según testigos, dos hombres efectuaron varios disparos al taxi de Ruth Alicia López Guisao. Como resultado de su participación social en proyectos de salud y educación, áreas en las cuales las milicias paramilitares quieren conservar el control, Ruth Alicia López Guisao y su familia han sido amenazadas repetidas veces y desplazadas forzosamente por grupos paramilitares en varias ocasiones. Al día siguiente del asesinato, la hermana de Ruth Alicia López Guisao recibió una llamada telefónica de alguien de la zona advirtiéndole que había rumores de que los asesinos esperaban en el funeral de Ruth Alicia López Guisao para atacar a sus hermanas y a su madre.

Front Line Defenders expresa su grave preocupación por el número de asesinatos de defensores y defensoras de derechos humanos en Colombia. El asesinato de Ruth Alicia López Guisao lleva el número de líderes comunitarios muertos en el país a 25 desde el inicio de este año. En su Informe Anual 2017, que abarca el período comprendido entre enero y diciembre de 2016, Front Line Defenders informó de 281 homicidios de defensores y defensoras de derechos humanos en todo el mundo. 86 de esos asesinatos tuvieron lugar en Colombia, lo que lo convierte en el país con el mayor número de asesinatos de defensores de derechos humanos en el mundo.

El gobierno colombiano firmó un acuerdo de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en noviembre de 2016, pero esto no ha hecho que el país sea más seguro para las/os activistas indígenas y de derechos humanos. A pesar de todas las pruebas en contrario, el gobierno continúa manteniendo la posición de que estos asesinatos no son ni sistemáticos ni vinculados a la actividad paramilitar, y se niegan a reconocer la causa de las muertes en lugar de tomar medidas para evitar que sucedan.

Front Line Defenders condena enérgicamente el asesinato de la defensora de derechos humanos Ruth Alicia López Guisao, ya que cree que el asesinato estuvo vinculado con su trabajo en defensa de los derechos de su comunidad.

Front Line Defenders insta a las autoridades colombianas a que:

1. Condenen enérgicamente el asesinato de Ruth Alicia López Guisao;

2. Tomen todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad y la integridad física y psicológica de las/os miembros de la familia de Ruth Alicia López Guisao;

3. Inicien una investigación inmediata, exhaustiva e imparcial sobre asesinato de Ruth Alicia López Guisao con el fin de identificar a los responsables, llevarlos ante un tribunal competente e imparcial, y aplicarles las sanciones previstas por la ley;

4. Garanticen que los defensores y defensoras de los derechos humanos en Colombia puedan seguir con sus actividades de defensa de los derechos humanos sin temor a represalias y sin restricciones cualesquiera, incluso hostigamiento judicial.