Historia del Caso: Carlos Pérez Guartambel
El 8 de diciembre de 2015, el líder indígena y defensor de derechos humanos, Sr Carlos Pérez Guartambel, estuvo por tercera vez en el hospital a raíz de un ataque que sufrió tras una serie de protestas en Ecuador el 3 de diciembre de 2015.
El defensor de derechos humanos fue pisoteado por caballos de la policía, la cual le estuvo siguiendo durante toda la marcha. Este episodio se dio tras una serie de detenciones, acoso e intimidación dirigida hacia muchos manifestantes, defensores y defensoras de derechos humanos en Ecuador.
Además de defensor de derechos humanos, Carlos Pérez Guartambel es líder indígena y presidente de la Confederación de Pueblos de la Nacionalidad Kichwa del Ecuador (ECUARUNARI), una organización cuyo objetivo principal es promover conocimiento sobre los abusos de derechos humanos contra las comunidades indígenas y lograr la protección y promoción de los derechos humanos en Ecuador, en particular los derechos de los pueblos indígenas.
El 8 de diciembre de 2015, el líder indígena y defensor de derechos humanos, Sr Carlos Pérez Guartambel, estuvo por tercera vez en el hospital a raíz de un ataque que sufrió tras una serie de protestas en Ecuador el 3 de diciembre de 2015.
El defensor de derechos humanos fue pisoteado por caballos de la policía, la cual le estuvo siguiendo durante toda la marcha. Este episodio se dio tras una serie de detenciones, acoso e intimidación dirigida hacia muchos manifestantes, defensores y defensoras de derechos humanos en Ecuador.
El 8 de diciembre de 2015, Carlos Pérez Guartambel fue dado de alta del Hospital Vicente Corral Moscoso, unos días después de haber sido brutalmente agredido por policías montados durante una manifestación pacífica en Quito, el 3 de diciembre de 2015. Esa fue la tercera visita del defensor de derechos humanos a un hospital para recibir tratamiento médico en relación a la violencia que sufrió. Como resultado del ataque, el defensor de derechos humanos sufrió múltiples lesiones y recibió 11 puntos de sutura en la cara y en la cabeza. Carlos Pérez Guartambel también informó que estuvo orinando sangre como consecuencia de una hemorragia interna causada por la agresión
El ataque ocurrió el 3 de diciembre de 2015, en el marco de una serie de manifestaciones en diferentes partes de Ecuador en oposición a la reciente aprobación de las enmiendas constitucionales que autorizan el presidente Correa a presentarse indefinidamente a reelección. Defensores y defensoras de derechos humanos de Ecuador también informaron que veintiún manifestantes fueron arrestados y condenados a 15 días de cárcel por "ofender el honor de los oficiales de policía" en un juicio sumario el día siguiente a la detención.
Los incidentes de persecución, amenazas y actos de hostigamiento contra defensores y defensoras de derechos humanos y líderes indígenas han aumentado desde agosto de 2015, cuando muchos defensores y defensoras de derechos humanos, entre ellos Carlos Pérez Guartambel, participaron en la Marcha de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador – CONAIE.
La Policía de Ecuador utiliza frecuentemente exceso de fuerza para dispersar protestas. Ellos han justificado esa acción al señalar la presencia de individuos perturbadores en las manifestaciones. El Relator Especial sobre el derecho a la libertad de reunión y de asociación pacíficas, Maina Kiai, ha declarado en repetidas ocasiones que la policía tiene el deber de distinguir entre manifestantes pacíficos y agentes provocadores, y que la presencia de unas pocas personas que participan en la violencia en la protesta y en los alrededores no autoriza a la policía a dispersar violentamente toda la manifestación o a utilizar la fuerza o arrestar a cualquier manifestante indiscriminadamente.
El 17 de agosto de 2015, una audiencia de deportación se va a llevar a cabo tras la cancelación de la visa de la defensora de los derechos humanos Sra Manuela de Picq.
La cancelación ocurrió posteriormente a su detención junto con otros compañeros defensores de los derechos humanos, los señores Carlos Pérez Guartambel y Salvador Quishpe, el 13 de agosto de 2015.
El 13 de agosto de 2015, los/a defensores/a de los derechos humanos antes mencionados fueron detenidos arbitrariamente y con el uso de fuerza durante la Marcha de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador - CONAIE. Esta marcha pacífica, que comenzó en la provincia de Zamora Chinchipe el 2 de agosto y se ha desplazado hasta Quito, fue organizada por grupos indígenas para exigir una reforma agraria basada en la soberanía alimentaria, un mejor acceso a los servicios de salud, y también para manifestar la oposición en contra de grandes proyectos de minería y la firma de un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea. La marcha también repudiaba las enmiendas constitucionales propuestas que permitirían el presidente Rafael Correa presentarse como candidato para una reelección indefinida. Varias otras personas también fueron detenidas durante el evento.
Durante el mes de agosto, miles de personas en Ecuador se han reunido en diferentes partes del país para protestar contra las enmiendas a la Constitución propuestas por el presidente Correa. El 13 de agosto de 2015, aproximadamente a las 19:00h, cuando las manifestaciones ocurrían en Quito, el defensor de los derechos humanos Carlos Pérez fue detenido, junto a Salvador Quishpe. Manuela Picq intentaba filmar los arrestos violentos con su cámara cuando ella también fue detenida y golpeada por la policía. Se cree que los defensores de los derechos humanos, quienes protestaban pacíficamente, fueron atacados como resultado de sus funciones de dirigentes y organizadores del evento.
Los tres fueron puestos en libertad más tarde en el mismo día, aunque todos mostraban signos visibles de violencia. La policía no ha devuelto la cámara a Manuela Picq. Los tres defensores de derechos humanos fueron llevados al Ministerio del Interior antes de ser trasladados a diferentes hospitales para recibir tratamiento por lesiones sufridas durante su arresto. Manuela Picq fue hospitalizada brevemente en el Hospital Eugenio Espejo y, el 14 de agosto de 2015, a aproximadamente la 1h de la mañana, fue trasladada a una clínica privada. Más tarde en aquel día fue llevada a la Coordinación Zonal 9 de la Unidad de Migración, donde recibió un documento firmado por el juez Juan Carlos Estrella Sampedro que le informaba de la cancelación de su visa. Manuela Picq se enfrenta ahora con el riesgo de deportación a Brasil, ya que había entrado en Ecuador con su pasaporte brasileño. Ella tiene la doble nacionalidad franco-brasileña.